Actualizado a: 22 de mayo de 2023
La industria ha evolucionado muchísimo desde que se produjo el nacimiento de Internet. Lo que antaño era un elemento casi exclusivo para familias de clase alta se ha convertido en un indispensable de casi cualquier hogar u empresa. Esto ha provocado que la velocidad, la estabilidad o el rango de la señal hayan adquirido una importancia capital. En ese contexto han nacido muchas tecnologías, naciendo cuestiones como la de si es mejor un WiFi Mesh o un repetidor para ampliar el WiFi en nuestra casa o nuestro trabajo.
Hoy, en GuíaHardware, queremos explicaros todo lo que necesitáis saber para poder responder a esta pregunta. No es la primera vez que hablamos de un tema similar. En otras ocasiones os hemos explicado cómo elegir entre un repetidor WiFi o un PLC, por ejemplo, de cuáles son los mejores WiFi Mesh del mercado y/o de cómo funciona esta tecnología, etc. Es una cuestión simplemente apasionante, con muchos aspectos muy interesantes
Tanto es así que si os llama la atención o queréis saber más sobre el tema, os recomendamos que visitéis los enlaces que os hemos adjuntado anteriormente. A través de ellos podréis descubrir un montón de cosas sobre unos y otros, sus principales diferencias, etc. Dicho esto, seguimos con el tema que os queríamos presentar hoy: cómo y por qué elegir entre un repetidor o un Wifi Mesh, así que vamos a ello.
¿Qué es un repetidor WiFi?
En primer lugar, ¿qué es un repetidor? Para poder responder a la pregunta principal del presente tema es importante entender qué es cada cosa, puesto que de otra forma podríamos omitir detalles importantes relacionados con las singularidades que puede presentar cada inmueble en el que se quiera usar cualquiera de estas dos opciones.
Dicho esto, podemos decir que un repetidor Wifi, también conocido como extensor de alcance o amplificador de señal WiFi, es un dispositivo que ha sido diseñado para mejorar el alcance y/o la cobertura de una red inalámbrica. Es decir, es un aparato electrónico que extiende el rango total de una red WiFi. Su principal objetivo, por lo tanto, es recoger la señal de un router, enrutador o punto de acceso WiFi existente y ampliar su alcance.
Esto lo hace recogiendo la señal original, la cual tendremos que haber configurado previamente, para luego ‘reenviarla’ de nuevo, pero amplificando y extendiendo su área de efecto. Esto es especialmente útil para cubrir áreas de un inmueble en las que, por determinadas circunstancias, la señal del WiFi es o bien débil, o bien no llega.
Con esto en mente podemos definir al repetidor WiFi como una suerte de intermediario de la señal inalámbrica entre el emisor original de la susodicha señal WiFi y el dispositivo final que queremos conectar con esta primera. Simplificándolo mediante un esquema muy sencillo, sería algo así: Router original → señal WiFi → Repetidor → señal WiFI amplificada → dispositivo que queremos conectar a la red.
¿Para qué sirve un repetidor WiFi?
Con esto en mente, debemos entender que un repetidor es incapaz de generar una señal propia. Es decir, nunca será él quien nos provea del WiFi de manera original, sino que ampliará la señal de otro dispositivo. Por lo tanto, no se puede usar un repetidor sin tener un router (por poner un ejemplo) que nos genere esa señal original. Dicho esto, el repetidor es un dispositivo especialmente útil en inmuebles (hogares, empresas, etc.) en los que haya habitaciones a las cuales la señal llega de manera debilitada por culpa de la presencia de obstáculos físicos como puede ser una pared.
Esta es su principal (y única) función, aunque hay algunos repetidores que pueden tener equipados alguna que otra tecnología adicional. No es habitual. Lo que sí es bastante más común es que su configuración sea más bien sencilla, pudiendo hacerlo todo a través de una página web, una app de móvil, etc. a la que podremos acceder mediante los datos que se nos proporcionaría a través del propio dispositivo. Suele venir en el interior de la caja, ya sea mediante instrucciones o un documento adicional.
Dicho esto, debemos recordar que el repetidor también presenta algunas desventajas. A fin de cuentas, es un amplificador de señal. ¿Qué quiere decir esto? Al recoger una señal WiFi y reenviarla, es muy, muy, muy probable que esta acabe perdiendo velocidad. Es algo normal y que tiene difícil solución, por lo que debemos tenerlo en cuenta tanto al compararlo con el WiFi Mesh como a la hora de valorar su compra sin tener en cuenta a este último.
Por eso es importante revisar las tecnologías con las que cuenta el repetidor, pues algunos vienen equipados con sistemas ‘especiales’ que buscan minimizar esta pérdida de velocidad. Habiendo aclarado esto, podemos finalizar este apartado con un breve resumen: un repetidor es un dispositivo que busca amplificar y extender la señal de una red WiFi previa.
¿Qué es el WiFi Mesh?
Ahora que ya sabemos qué es y cómo funciona un repetidor, toca repasar las singularidades del WiFi Mesh. De base, podemos empezar diciendo que estamos ante un tipo de tecnología algo más compleja. Sobre todo en la ejecución, ya que parte de un trabajo de arquitectura más profundo que el del repetidor. Dicho esto, se podría decir que el WiFi Mesh es un nuevo tipo de tecnología que busca revolucionar, potenciar y mejorar el sistema mediante el cual se reparte una señal inalámbrica en un determinado lugar.
A diferencia de los repetidores WiFi y los enrutadores y/o routers normales, el WiFi Mesh crea una red extendida a través de una serie de puntos de acceso individuales. Por lo tanto, lo que esta tecnología pretende es crear una red a través de puntos acceso estratégicamente colocados en secciones concretas para crear una red inalámbrica lo más estable posible. El objetivo, pues, es desarrollar una señal de alta cobertura y gran rendimiento.
Por norma general, esto no suele ser especialmente necesario en la mayoría de hogares, aunque siempre depende de las singularidades de estos. No es lo mismo un chalé de dos plantas en donde hay numerosas habitaciones conectadas a la red que un apartamento de un solo piso en donde el mayor obstáculo son las paredes que hay entre las diferentes estancias. Posiblemente, esta sea una de las variables que más nos hagan pensar en una u otra opción.
¿Para qué sirve el Wifi Mesh?
Volviendo al tema que nos acontece, un sistema WiFi Mesh funciona con un dispositivo central y unos puntos de acceso conectados directamente a él que generan sus propias señales. Es decir, cada nodo funciona como un punto de acceso a la red. No amplifica la señal, sino que crea la suya propia. La gran ventaja que esto ofrece es que la señal es igual de rápida e intensa, sea cual sea el punto al que estemos conectados.
Lo interesante es que la conexión siempre es la misma, por lo que los dispositivos siempre se conectarán al punto de acceso con la señal más intensa. Si cambiamos un portátil de habitación, por ejemplo, podría conectarse a otro nodo distinto sin necesidad de hacer nada especial al determinar que la señal es la misma, pero es más intensa al cambiar el punto de acceso.
Esto permite gestionar la red en un inmueble de manera casi total sin necesidad de usar cualquier tipo de amplificador. Del mismo modo, la cobertura y la señal será muy uniforme si el sistema está bien instalado, puesto que la idea es crear un rango total que aborde todas las áreas del lugar. Lo bueno es que esta configuración no es inmóvil. Es decir, se pueden agregar o quitar nodos sin problema.
Y aunque pueda parecer muy complejo —que lo es—, la interfaz para el usuario suele ser bastante sencilla, ya que también funciona mediante webs o apps móviles. Lo más complejo sería la instalación inicial, pero esto es algo de lo que el usuario no debería preocuparse más allá de determinar qué zonas necesitan conexión y cuáles no. Por lo tanto, podríamos concluir diciendo que el WiFi Mesh es un tipo de dispositivo diseñado para generar varias señales idénticas en diferentes puntos.
WiFi Mesh o repetidor: cuál elegir
Llegados a este punto debemos matizar el título del presente artículo: WiFi Mesh o repetidor: cuál elegir para ampliar el WiFi. Hemos arrancado con estas palabras para, posteriormente, poder aclarar cualquier duda. Dicho esto, debemos formular tres preguntas:
- WiFi Mesh o repetidor: cuál elegir para ampliar el WiFi → Repetidor
- Cuál elegir para crear una red de malla WiFi → WiFiMesh
- WiFi Mesh o repetidor: cuál escoger entre las dos → Depende
Como habréis podido comprobar, aunque la base es muy similar, no son lo mismo. Cuando tenemos en cuenta esto, las dos primeras cuestiones se resuelven muy fácilmente, pero la tercera es algo más compleja. Determinar cuál de las dos es mejor depende de muchas características según el individuo y sus circunstancias. Es decir, que debemos tener en cuenta qué es lo que necesitamos en realidad.
Para empezar, debemos tener en cuenta el precio. Por norma general, una red construida con WiFi Mesh tenderá a ser más cara, mientras que un repetidor suele ser más barato. A fin de cuentas, la primera se basa en diseñar una red en concreto para nuestro inmueble, mientras que la segunda simplemente ampliará la que ya tenemos.
Consecuentemente, no podemos daros una respuesta definitiva, pero sí que podemos ofreceros una serie de tips para que podáis escoger la que mejor se adecúe a vosotros. Para empezar, debemos entender que queremos. Si simplemente buscamos que la señal que tenemos en el salón llegue mejor a un dormitorio porque la recepción es débil, un repetidor será más que suficiente. Sucede lo mismo si solo queremos que la conexión sea más estable o llegue.
Entonces… ¿Cuál es la que más me interesa?
El repetidor, pues, es una gran opción cuando queremos extender el rango a una o dos habitaciones en concreto. Entendemos, pues, que se adapta bastante bien habitaciones que estén en un mismo piso y en los que solo falle la conexión por los obstáculos físicos. Por el lado contrario, el WiFi Mesh es una opción más ideal si hablamos de una casa grande en donde la conexión se divide en varios pisos, una oficina de trabajo, etc. Es decir, inmuebles de gran tamaño en donde es mejor tener varios accesos que una señal amplificada.
El primer factor para elegir una u otra es, pues, el tamaño del lugar. El segundo punto que debemos valorar es el número de dispositivos que queremos conectar. En un domicilio, habitualmente no habrá más de una decena de dispositivos conectados. Entre móviles, televisores, ordenadores, etc. es raro que haya más de esta cantidad funcionando al mismo tiempo. En ese caso, el router junto con el repetidor es más que suficiente, pero hay casos y casos.
Si es muy habitual que todos estén siempre conectados y notamos que la conexión falla un poquito, el WiFi Mesh es una opción más interesante. A fin de cuentas, su objetivo es proporcionar diferentes señales mediante distintos nodos. Esto permite que la conexión sea más estable y eficaz al conectar muchos dispositivos, pues funcionarían con señales diferentes. En conclusión, el segundo factor que debemos valorar es el número de dispositivos: si son pocos, un repetidor irá bien. Si son muchos y funcionan casi siempre de manera simultánea, mejor WiFi Mesh.
WiFi Mesh o repetidor: conclusiones
La conclusión final a modo de resumen que podemos daros es que el repetidor es una opción más económica. En general, será más que suficiente cuando solo queremos extender la señal a un par de habitaciones a las que no llega bien la señal. También es interesante cuando no hay muchos dispositivos conectados de manera simultánea. Es ahí cuando destaca. Ahí y cuando todo está en el mismo piso.
Por su parte, el WiFi Mesh nos parece más adecuado para grandes estructuras, ya sean oficinas de trabajo o casas con varios pisos. En esos puntos es donde es una opción más interesante. Bueno, y cuando queremos conectar muchos dispositivos al mismo tiempo. En estos casos el WiFi Mesh también es más interesante, porque nos ‘asegura’ una conexión más estable en todos ellos.