Actualizado a: 18 de enero de 2024
Los dispositivos de almacenamiento conectado en red o servidores NAS son un tipo de dispositivo orientado al almacenamiento, y con el que podremos crear nuestra propia nube en casa. Algunos NAS también permiten hacer otras cosas como montar servidores web, VPNs o incluso nuestro propio servicio de streaming con el contenido que tengamos en nuestros discos duros.
Son muchos los discos duros específicos para NAS que garantizan que nos van a proporcionar un mayor rendimiento en este tipo de dispositivos, así como una mayor esperanza de vida. Pero, ¿de verdad merece la pena pagar el sobrecoste de un disco duro para NAS con respecto a uno normal? ¿Debemos conformarnos con un disco duro normal, o uno específico para NAS? Esa es la cuestión.
Los discos duros específicos para NAS cuentan con diversas tecnologías que, según afirman sus fabricantes, los hacen idóneos para este tipo de dispositivos, siendo su principal facultad la de estar diseñados para un funcionamiento 24 x 7 constante, algo para lo que no están diseñados los discos duros normales.
Diferencias entre discos duros normales y para NAS
Aquí tienes una tabla que resume las ventajas e inconvenientes de los discos duros normales y los discos específicos para NAS:
Discos duros normales | Discos específicos para NAS | |
---|---|---|
Ventajas | – Precio más económico | – Mayor fiabilidad y durabilidad |
– Amplia disponibilidad | – Mayor rendimiento en operaciones de lectura/escritura | |
– Buena capacidad de almacenamiento | – Diseñados para funcionar continuamente y estar en línea durante largos períodos de tiempo | |
Inconvenientes | – Menor fiabilidad y durabilidad | – Precio más elevado |
– Menor rendimiento en operaciones de lectura/escritura | – Menor disponibilidad | |
– No diseñados para su uso continuo | – Menor capacidad de almacenamiento |
En general, los discos duros específicos para NAS tienen una mayor fiabilidad, durabilidad y rendimiento en comparación con los discos duros normales. Sin embargo, también tienen un precio más elevado y una menor disponibilidad en el mercado. En caso de que el presupuesto sea una limitación, los discos duros normales pueden ser una opción más económica, aunque con un menor rendimiento y una menor fiabilidad.
¿Qué tipo de disco duro es mejor para NAS?
Los discos duros para NAS cuentan con diversas tecnologías que optimizan su funcionamiento. Ya hemos mencionado la característica más importante, que no es otra que estar diseñados para un funcionamiento 24 x 7 (que es lo normal en los NAS, dejarlos encendidos permanentemente como servidores domésticos), pero tienen también otras características que los hacen ideales para estos sistemas.
Una característica importante es su compatibilidad ya que la mayoría de NAS del mercado son compatibles con cualquier otro disco duro del mercado mientras su interfaz sea SATA 3. También es verdad que la mayor parte de ellos están optimizados en su firmware para ser compatibles con los discos duros específicos para NAS, aprovechando de esa forma todo su potencial.
Mientras que los discos duros normales están optimizados para un uso genérico, los discos para NAS están optimizados para su utilización en estos dispositivos, y generalmente nos van a ofrecer un mejor rendimiento en tareas de red como transferencia de archivos, descargas (incluyendo Torrents, que parten los archivos grandes en muchos archivos pequeños para facilitar la descarga por bloques). También incorporan una mayor memoria caché que ayudará a la corrección de errores en caso de pérdida de corriente, para que no perdamos datos. Finalmente cabe destacar su mejor funcionalidad en sistemas RAID de discos duros.
¿Merece la pena comprar un disco específico para NAS?
Para un NAS (Network-Attached Storage), es recomendable utilizar un disco duro específico diseñado para su uso en sistemas NAS. Estos discos duros están diseñados para tener una mayor durabilidad y fiabilidad en entornos de almacenamiento en red, con una menor tasa de fallos y un mayor rendimiento en operaciones de lectura y escritura.
Los discos duros específicos para NAS también suelen tener características adicionales como una mayor capacidad de almacenamiento, un mayor número de cabezas de lectura/escritura y una mayor capacidad de memoria caché, lo que permite un mejor rendimiento y una mayor capacidad de almacenamiento.
Además, los discos duros específicos para NAS están diseñados para funcionar de forma continua y estar en línea durante largos períodos de tiempo, lo que los hace ideales para su uso en sistemas NAS que funcionan 24/7.
Si puedes pagar el sobreprecio que cuestan los discos duros específicos para NAS, es recomendable hacerlo ya que están de verdad optimizados y no se trata de una mera estrategia de márketing para cambiarles la estética y subirles el precio.
Tienen diversas facultades que van a mejorar el rendimiento, su desempeño general, y su durabilidad cuando los utilicemos en NAS. Claro está que a fin de cuentas el sobreprecio es bastante notorio pero ya sabemos, quien algo quiere, algo le cuesta.
Sin embargo los discos duros normales también pueden funcionar en un NAS sin ningún tipo de problema. Claro que serían mas propensos a estropearse antes, con un funcionamiento 24 x 7 con un disco duro que no ha sido diseñado para ello.
En definitiva, como hemos dicho antes, si podemos pagar el sobreprecio que cuestan los discos duros específicos para NAS, es recomendable que lo hagamos. Su rendimiento y durabilidad en teoría serán mayores, así como nuestra tranquilidad.
Pero si no podemos permitírnoslo, tampoco nos rasguemos las vestiduras por haber invertido en discos duros normales. Eso sí, siempre hemos de tener en cuenta que tendrán más posibilidades de fallarnos.