Actualizado a: 11 de julio de 2023
Auriculares inalámbricos vs. con cable, ¿cuál se escucha mejor? Sin duda alguna, esta es una pregunta que muchos usuarios se habrán formulado en algún momento de su vida. No obstante, y como en muchos otros temas, aquí hay un gran «depende», puesto que la respuesta no está tan clara. No cuando tenemos en cuenta que en el mercado hay una infinidad de modelos diferentes. Aunque está claro que sí que hay una evidencia y unos datos que nos dicen cuál de los dos tipos suele funcionar mejor, no todo se resume a una única respuesta.
O lo que es lo mismo, aunque los auriculares con cable tienden a escucharse mejor, hay muy diversos aspectos que pueden evidenciar una realidad bien diferente. Véase, por ejemplo, el caso de la gama. Por mucho que los auriculares con cable tengan ciertas ventajas respecto a los inalámbricos, la calidad del sonido de unos AirPods 3 con los de unos alámbricos cualesquiera. De hecho, incluso entre los propios inalámbricos hay diferencias, tal y como ya pudimos comprobar en nuestra comparativa de los AirPods 3 y los AirPods Pro 2.
Por lo tanto, de buenas a primeras, no podemos decir que los auriculares con cable son simplemente mejores que los auriculares inalámbricos, porque no es así. No en el 100% de los casos. Hay supuestos, modelos, etc. que influyen de manera muy directa y muy concreta en la calidad del sonido. Hoy, en GuíaHardware, queremos explicaros todo lo que necesitáis saber sobre este tema para que no tengáis ninguna clase de duda. Todo ello partiendo de la base de que, de base, siendo muy, muy, muy genéricos, los auriculares con cable tienen mejor calidad de sonido. ¿Por qué? Lo veremos.
Características de los auriculares con cable vs. inalámbricos
Para llegar al fondo de este asunto, por supuesto, lo primero que tenemos que hacer es entender las cualidades y características de cada tipo de auricular. Empecemos, pues, por los auriculares alámbricos. Tal y como indica su propio nombre, estos tienen un cable, por lo que se conectan a determinados dispositivos a través de una clavija o jack que puede variar en tamaño, calidad, etc.
Por lo tanto, son elementos que necesitan un tipo de entrada concreta para poder funcionar adecuadamente. Sin esta, no se pueden utilizar, por lo que, de base, puede ser un poco más complicado escoger un modelo u otro. Como norma general, el tamaño y el tipo de entrada está bastante estandarizado, pero hay modelos, como los de iPhone, que necesitan conexiones muy concretas. Esto puede ser un dolor de cabeza y una desventaja. Una de varias.
Desventajas de los auriculares con cable
Por supuesto, una de las principales desventajas de los auriculares con cable es que vamos a tener que asegurarnos de que la conexión entre, por ejemplo, el móvil y los auriculares es compatible. De base, esto puede cerrarnos algunas oportunidades, por lo que consideramos que es una clara desventaja en algunas circunstancias. Esta es una de las más obvias.
Otra muy importante es que, por pura lógica, física y diseño, tienen un rango de funcionamiento bastante limitado. Solo podremos usarlos a una distancia concreta y, en algunos casos, esta es muy corta. Por lo tanto, su funcionalidad y ergonomía es peor que la de los inalámbricos. Para solventar ese problema, se pueden optar por modelos con un mayor rango. Es decir, con un cable más largo, pero suelen ser algo más incómodos. Y sí, tienen el don de enredarse ellos solos.
Aparte, como desventaja, también está el tamaño. Por norma general, los auriculares con cable ocupan más espacio y son más grande, por lo que transportarlos puede ser más molesto. No es el peor de los inconvenientes que ofrece, pero es una realidad que debemos afrontar cuando usamos este tipo de auriculares.
Ventajas de los auriculares con cable
No todo puede ser negativo, por supuesto. Su principal ventaja respecto a los auriculares inalámbricos es que, cuando comparamos modelos de características y precios similares, los alámbricos suelen tener mejor calidad de sonido. En lo más importante, que es la calidad del audio, tienden a ofrecer mejores resultados en condiciones similares. Aparte, tienen una gran ventaja: no tienen batería. O lo que es lo mismo, no tenemos que preocuparnos de recargarlos antes de salir de casa.
Aunque esta ventaja se puede reducir según el modelo, está claro que es mucho más cómodo no tener que prestar atención a esta particularidad. Nos ahorra muchos contratiempos y, si nos olvidamos, no pasa nada, porque van a seguir funcionando igual. Solo es un problema si el dispositivo (móvil, por ejemplo) tiene poca batería, pero ahí los inalámbricos están en una situación parecida.
Del mismo modo, igual que es un contratiempo el que tengan un rango limitado, si estamos caminando o hemos salido a correr, si nos encontramos sentados en el tren, el autobús o el metro, etc., son muy prácticos y cómodos, por lo que la distancia limitante del cable deja de ser una desventaja para ser una simple cualidad de los auriculares.
Características de los auriculares inalámbricos vs. con cable
Dicho esto, nos toca hablar de los auriculares inalámbricos. Estos tienen sus propias cualidades. Por supuesto, su definición es la de un set de auriculares que funcionan sin cables, siendo esta su principal virtud y característica. Se han puesto muy de moda y, con el paso del tiempo, hay cada vez más modelos. La mayoría de grandes marcas ya han asumido que son un producto de alto consumo, por lo que hay mucho donde elegir.
Todos ellos tienen que venir con algún tipo de sistema de carga, siendo el más habitual un estuche que se puede conectar a la red eléctrica de nuestro domicilio. Otros muchos, además de este estuche de carga básica, pueden incluir un segundo estuche que funciona como batería portátil. Algunos modelos combinan ambos estuches en uno solo, funcionando tanto como base de carga como de batería portátil.
Estos son especialmente interesantes, puesto que nos permiten alargar su duración cuando estamos fuera de casa. Esta es una de sus principales ventajas, pero está claro que no es oro todo lo que reluce, ya que también presenta algunos contratiempos.
Desventajas de los auriculares inalámbricos
Para empezar, la batería. A diferencia de los auriculares con cable, los inalámbricos necesitan que recarguemos su batería para funcionar. O lo que es lo mismo, si nos olvidamos de enchufarlos a corriente durante unas horas después de utilizarlos y/o de que se descarguen, no podremos usarlos. Es un contratiempo, sin duda, ya que nos exigen un poquito más de cuidado y atención.
Eso sin tener en cuenta el precio. Por sus características, los inalámbricos suelen ser netamente más caros que los auriculares con cable. En general, por una calidad de sonido similar (siendo muy generalista y poco preciso), vamos a tener que pagar más por unos inalámbricos que tengan la misma calidad que unos alámbricos. Pagamos por comodidad y portabilidad.
Asimismo, aunque depende del modelo, podemos citar como desventaja esa misma calidad de sonido. En general, debido a que la información se transmite de manera menos… directa, por decirlo en términos simples para que me podáis entender, la calidad es algo peor. Todo depende, como he dicho, del modelo, pero el sonido puede ser peor al transmitirse como señal inalámbrica.
Ventajas de los auriculares inalámbricos
Por supuesto, también ofrecen diversas ventajas y beneficios. Entre ellos podemos destacar la comodidad. Al no tener ningún tipo de cable, aunque siempre depende del modelo, tenemos un mayor rango de funcionamiento. Es decir, que no necesitamos estar pegados al dispositivo que emite la señal para poder escuchar música. Esto es algo muy útil cuando estamos, por ejemplo, en casa, ya que podemos movernos por diferentes partes sin necesidad de estar pegados, por ejemplo, al móvil.
Por supuesto, el tema de la ergonomía también tiene ventajas en espacios abiertos, por el hecho de que no tenemos que estar atentos al cable o que este nos esté ‘golpeando’ mientras corremos, pues más que mejor. A todo esto debemos sumarle que, en general, suelen ser bastante más estéticos, aunque esto es algo que a muchos (me incluyo) les da un poquito igual. Del mismo modo, como funcionan por señales inalámbricas, se suelen poder configurar en muy diferentes dispositivos.
Al menos siempre y cuando estos puedan emitir y recibir el mismo tipo de señal, aunque suele ser bastante genérica. Por lo tanto, como principal ventaja, podemos decir que los auriculares inalámbricos son mucho más cómodos y prácticos que los que tienen cable.
Auriculares inalámbricos vs. con cable: calidad de sonido
Llegados a este punto, nos toca abordar la cuestión que verdaderamente nos interesa. En los auriculares inalámbricos vs. con cable, la duda de cuál se escucha mejor sigue presente. Ya os hemos dicho que, en general, los alámbricos suelen ofrecer mejores resultados, pero esto por sí solo no se sustenta. Es por esto mismo que, aunque siempre depende de cada persona (la capacidad auditiva y las condiciones individuales pueden afectar a la percepción y recepción del audio y su calidad) vamos a hablar de números.
Citando a PCcomponentes, podemos recuperar unos datos muy, muy clarificadores. Por un lado, los auriculares inalámbricos, funcionen por Bluetooth o WiFi Direct, pueden transmitir datos desde 768 kbps hasta 3000 kbps. Ahora bien, la mitad de la banda ancha, aproximadamente, la suele consumir la propia transmisión que se realiza desde el receptor al emisor. Por lo tanto, hablamos de 3000 kbps máximos teóricos en condiciones óptimas y sin pérdida alguna de datos.
Esto es algo extremadamente complicado, por lo que es normal que no alcancen esos valores por norma general. Por su parte, aunque el máximo teórico de la mayoría de auriculares con cables es peor, hablamos de una transmisión estable y sin ningún tipo de pérdida. En general, los auriculares con cable tienen una capacidad de 2304 kbps. Si los comparamos con los 3000 máximos teóricos de los inalámbricos, puede parecer peor, pero debemos recordar que los inalámbricos sí que pierden parte de la señal.
Todo depende del modelo y la situación
Ahora bien, debemos tener en cuenta que la mayoría de aplicaciones suelen emitir señales de entre 320 y 512 kbps. Y aunque pueda parecer muy poco, estos son los valores que manejan, por ejemplo, las apps de YouTube, Spotify o Apple Music. Su calidad es muy alta, por lo que debemos tener en cuenta que en la mayoría de casos es posible que ni notemos la diferencia entre unos auriculares alámbricos y unos inalámbricos.
Estamos hablando, por supuesto, de una comparativa en la que optamos por dispositivos alámbricos e inalámbricos con condiciones similares. Siendo realistas, si compramos uno u otro y el precio es similar, es mucho más fácil que los auriculares con cable nos ofrezcan una calidad de sonido más alta y superior. A fin de cuentas, es una tecnología más económica en líneas generales.
Por supuesto, todo depende. Si el modelo inalámbrico es de un precio y una gama muy superior, el sonido va a ser, en efecto, mejor. Como ya hemos dicho, todo depende de las circunstancias, pero en igualdad de condiciones el sonido de los con cable es mejor. Otra cosa distinta es que seamos capaces de notar esa diferencia de manera efectiva. En la mayoría de los casos, salvo que el salto de calidad sea muy, muy grande, no nos daremos casi cuenta.
Teóricamente, la mayoría de archivos de audio funcionan a 256 kbps cuando no usamos apps de alto rango o archivos de gran calidad. Por lo tanto, en la mayoría de casos no vamos a perder calidad y no vamos a notar la diferencia. Si somos muy puntillosos y/o utilizamos archivos de gran calidad, ahí sí que podemos notarlo, pero en un nivel cotidiano, no tanto.
Conclusiones
Siendo realistas, la mayoría de usuarios no van a notar la diferencia en la calidad de sonido entre unos auriculares con cable y otros inalámbricos si estos tienen características similares. Por lo general, lo más recomendable es usar aquellos con los que estemos más cómodos. Si se busca mejor calidad, es más fácil encontrarlo en auriculares inalámbricos. Todo sea dicho, los auriculares alámbricos también tiene una gran ventaja: la estabilidad.
Al transmitir los datos de manera más ‘directa’, dicho en términos simples, es mucho más complicado que se pierda información. Por lo tanto, en situaciones en las que necesitamos que no se pierda ni un solo detalle, como puede ser jugando online a un título competitivo, siempre os vamos a recomendar auriculares con cable.
En otras circunstancias, consideramos que depende mucho más de vuestros gustos propios, necesidades y consideraciones que de cualquier otra cosa. Por lo demás, en el enfrentamiento auriculares con cable vs. inalámbricos, los primeros tienen mejor calidad de sonido y mayor estabilidad, pero en muchos casos no lo notaríamos.