Actualizado a: 27 de abril de 2023
¿Quieres personalizar tu teclado mecánico? Puedes hacerlo, aunque el proceso puede ser algo más complejo de lo que cabría esperar. Sobre todo cuando vamos más allá de simplemente modificar las keycaps (teclas) y o agregarle un nuevo reposamuñecas con el que descansar nuestros ‘brazos’ tras pasar varias horas junto con él.
Y es que aunque muchas personas no lo saben, podemos hacerlo nosotros mismos. En algunos casos es bastante complicado, mientras que en otros es muy sencillo. Si sabemos elegir bien, podremos alterar su composición sin complicarnos demasiado. Y si queremos ir más allá, pues siempre tendremos esa opción. Hay formas muy diferentes de plantear el tema.
Inclusive, se puede pensar en contratar a un profesional y/o a una persona que se haya especializado tanto por trabajos ocasionales como de forma recurrente al proceso. En el mercado hay todo tipo de artistas que disponen de experiencia o conocimientos más que suficientes para realizar el cambio sin contratiempos.
Guía para configurar y personalizar tu teclado mecánico: qué podemos cambiar
Será cosa nuestra, pues, decidir si preferimos una opción u otra. Sea como fuere, hoy, en GuíaHardware, os vamos a dejar un listado explicativo con todos los elementos que podéis personalizar de vuestro teclado mecánico. Como ya hemos comentado, algunos son más complejos, pero también los hay más sencillos. En cualquier caso, en todos ellos habrá un detalle muy importante: buscar bien.
Cada teclado es un mundo, ya sea por su tamaño, el tipo de conexión, el diseño, la carcasa, etc. Es por eso mismo que en determinadas circunstancias debemos prestar atención a unos detalles. ¿Cuáles? Os lo contamos.
Personalizar teclas
Por supuesto, una de las maneras más sencillas y eficientes —en términos visuales— de personalizar nuestro teclado mecánico es modificando las teclas. Es una de las cuestiones más acuciantes en muchos casos, aunque es importante hacer las cosas con calma. Y aunque en principio pueda parecer que cualquier tipo de tecla sirve en todos los teclados, no es así.
Existen diferentes tamaños y compatibilidades, por lo que —antes de nada— tendréis que consultar cuál es vuestro modelo. Por norma general, esto lo podéis hacer consultando el modelo de vuestro teclado empleando términos específicos relacionados con el tamaño de la tecla. Si no lo conseguís resolver, siempre podéis preguntarnos, pero no deberíais tener muchos problemas en ese sentido.
Ahora bien, debemos tener en cuenta que es posible que esta información no esté disponible si usamos teclados menos ‘relevantes’. A fin de cuentas, Razer, Corsair o Logitech, por citar algunos ejemplos, tienen mayor presencia en el mercado. Sobre todo en la industria de los teclados mecánicos. Por esto mismo es mucho más fácil personalizar uno de sus teclados. A más demanda, más facilidad. No tiene mucha más historia.
Respecto a las tiendas, lo cierto es que se pueden encontrar en muy diversos comercios. Grandes tiendas como Amazon o AliExpress suelen disponer de packs de teclas, mientras que otras tiendas especializadas también. Hay muchos artistas que se especializan en diseñar teclados personalizados, por lo que todo es buscar. Sobre como cambiar las teclas, es muy sencillo, la verdad.
Tan solo tenemos que sacarlas y cambiarlas. Si tu teclado no te deja hacerlo de manera fácil (es simplemente tirar un poco hacia arriba desde un borde de la tecla) es que lo mismo no puedes. P.D. Cuidado, hay teclas que tienen ‘ganchos’ metálicos que funcionan como palancas complementarias. Suelen ser «espacio», «enter», «delete» y similares. Es decir, aquellas que son más grandes de lo ‘normal’.
Switch (estabilizadores)
Junto con las teclas, es el elemento más importante de casi cualquier teclado. Al menos cuando hablamos de funcionalidad. A fin de cuentas, hablamos de la pieza que se ocupa de interaccionar con la tecla y el teclado. Es el intermediario, por lo que afectará muy notablemente a la experiencia. Influye en el «clic» y en el sonido, así como la respuesta y la resolución.
Personalmente, no os recomendamos que los cambiéis, pues la mayoría de teclados no permiten que los cambiemos de manera nativa fácil. Depende muchísimo del modelo. Como habréis podido comprobar en los vídeos de referencia que os hemos adjuntado, hay teclados que se pueden modificar empleando una ‘pinza’ especialmente diseñada para extraer switches. Si este es vuestro caso, más que mejor.
En el contrario, pues es posible que tengáis que desmontar el teclado entero y tirar incluso de herramientas especializadas. Si esta es vuestra situación, no os lo recomendamos para nada. De hecho, incluso en el anterior, tampoco lo haremos, puesto que es un proceso muy complejo. Lo ideal es adquirir un teclado que esté equipado con los estabilizadores que más nos gusten y trabajar a partir de esa base.
Sea como fuere, y como siempre, la decisión es completamente vuestra. Si tenéis los conocimientos necesarios y/u os atrevéis, genial. Ahora, tened en cuenta que esto afectará a la garantía del teclado. Es decir, la perderéis, pues es un cambio que, en muchos casos, deja ‘muestras’ físicas. A diferencia de las teclas, aquí pueden quedar ‘pruebas’ de la modificación.
Cable
Aunque no es un cambio tan recomendable, también se puede modificar el cable que utiliza nuestro teclado. Solo es válido para aquellos que funcionen por USB y se puedan conectar/desconectar mediante este mecanismo. Bueno, mediante este u otro tipo de entrada, pero ya nos entendéis. Ahora bien, cambiar el cable es algo más ‘complejo’ de lo que puede parecer, pues debemos prestar atención a la necesidad energética del teclado.
Hay teclados mecánicos concretos que pueden necesitar una potencia ligeramente superior, por lo que no podemos elegir uno cualesquiera. Es mejor revisarlo antes. Además, hay distintos tipos de cables, desde los Techflex hasta los trenzados, pasando por los que se construyen en espiral, los de aluminio o los de PVC. Personalmente, los Techflex son uno de nuestros favoritos por su gran resistencia.
Los Paracord (trenzados) también son muy interesantes en ese sentido, aunque sacrifican parte de su resistencia por una mayor ergonomía y flexibilidad. Aquellos que están diseñados en espiral tienen un acabado mucho más llamativo y los podemos encontrar con diversos materiales. Si usáis uno de estos, volvemos a recomendaros el Paracord o el Techflex como material principal.
Los de PVC, si vais a personalizar, son los que menos nos gustan. Los de aluminio son bastante caros y lo cierto es que no son santo de nuestra devoción. Al menos no cuando hablamos de un teclado. Optaríamos por cualquiera de los dos primeros materiales en la mayoría de casos.
O-Rings
Los O-Rings son un producto más bien desconocido que puede ser interesante si buscamos cambiar el tiempo que una tecla tarda en hacer el ‘clic’ efectivo o queremos modificar la sensación de ‘golpeo’ o el sonido de los propios switches. En general son bastante económicas y se colocan en el molde que conecta la tecla con el switch. Son muy fáciles de poner, puesto que se insertan de manera muy natural. Ahora bien, es importante prestar atención a su tamaño.
Como hay teclas con diferentes construcciones, debemos elegir los O-Rings que se ajusten a ellas por tamaños. Si los cogemos demasiado grandes, obviamente no entrarán, mientras que si son demasiado pequeñas, podrían no ajustarse bien y terminar cayéndose, lo que acaba siendo muy, muy molesto. Por eso es tan importante revisar el tamaño tanto de las teclas como de los propios O-Rings.
Reposamuñecas
Un añadido que puede gustar a mucha gente y que no pocos usuarios aprecian bastante. Incluir uno o no en nuestro teclado depende de nuestra postura a la hora de escribir. En función de esta, es posible que se convierta en un añadido estético sin más, por lo que os recomendamos que reviséis bien vuestra manera de escribir antes de nada para verificar si de verdad os sirve o no.
Con esto en mente, tendréis que medir vuestro teclado para ver si es compatible y determinar si la unión os sirve. Por ejemplo, algunos teclados de Razer están equipados con reposamuñecas que se unen mediante una suerte de ‘imán’ para facilitar su retirada y/o su sujección. Es importante ver si tiene algún tipo de ‘tecnología’ concreta para ver si la podremos aprovechar o no.
Guía para configurar y personalizar tu teclado mecánico: dos apartados más complejos
Los siguientes apartados son algo más complejos y en muchos casos pueden requerir de conocimientos avanzados, herramientas especializadas, soldadura, etc. según el modelo. Los citamos para que tengáis el ejemplo y la información, mas no los recomendamos de buenas a primera si solo queréis personalizar el teclado. De hecho, si estáis echando un vistazo a este apartado, os interesa mucho revisar nuestro tutorial sobre cómo montar tu propio teclado customizado, ya que os explicamos más sobre los siguientes apartados.
PCB (printed circuit board)
Si nos planteamos cambiar el PCB, lo cierto es que más que modificar un teclado, estaremos diseñando uno desde cero. A fin de cuentas, este es el núcleo de cualquier teclado y modificarlo afectará al rendimiento del resto de componentes. Básicamente, es el componente en el que se acoplarán los estabilizadores y, por ende, las teclas.
En muchos casos funciona mediante soldadura, aunque los hay que se integran mediante clavijas de inserción. Los hay de diferentes tamaños y solo se lo recomendaríamos a quienes manejen mucho del tema y dispongan de conocimientos algo más avanzados, puesto que afecta a la funcionalidad del teclado de manera muy drástica.
También debemos prestar atención al layout, distinguiendo entre el ANSI (americano, sin tecla Ñ) o el ISO (europeo, con tecla Ñ y una tecla adiciona al lado del shift izquierdo). Si usamos un PCB personalizado, también necesitaremos un ‘plate’, que vendría a ser la estructura de sujeción que se ubica entre esta y los switches. Podría decirse que es algo así como el esqueleto, aunque hay teclados que no lo usan o que lo integran de manera directa.
Caja
Por supuesto, la caja es uno de los elementos más singulares de cualquier teclado. Es la estructura externa y debe coincidir con la del PCB. Al igual que en el caso anterior, lo ideal es que solo lo cambiemos si tenemos conocimientos avanzados, pues puede ser más complejo de lo que parece. Será necesario tocar el mecanismo interno par amoldarlo bien. Hay muchos tipos. Algunos teclados muy populares pueden tener cajas especialmente diseñados para ellos.
Guía para configurar y personalizar tu teclado mecánico: artistas especializados
Si te has planteado cambiar todos y cada uno de los elementos o diseñar uno desde cero, es posible que lo que más te interese sea contratar a un artista especializado en este ámbito. Aunque claramente será más caro, podrá realizar un ajuste a tu medida modificando y escogiendo los componentes que tú le indiques dentro de su disponibilidad y compatibilidad. Muchos streamers lo han hecho para diseñar sus propios teclados y cada vez hay más gente ‘formada’ en estas áreas.
Inclusive, hay quienes lo hacen de manera ‘aficionada’. Es decir, no es su profesión (para la mayoría no lo es), pero tienen los conocimientos técnicos necesarios como para hacerlo de manera efectiva y segura. Si te apetece cambiar la caja, la base, todas las teclas, etc. tal vez esta sea tu mejor opción, pero ya depende de los gustos y capacidades de cada uno.